Nichols-Shepard

En el crepúsculo del siglo XIX y el amanecer del siglo XX, Nichols-Shepard se erigió como un creador prominente de maquinaria agrícola. Sus orígenes se remontan al humilde taller de herrería de John Nichols, establecido en Battle Creek, Michigan. Las ofertas principales de la compañía se centraron en innovadoras trilladoras y potentes máquinas de vapor. Un nuevo capítulo comenzó en 1929 cuando Nichols-Shepard se unió a Hart-Parr y Oliver Chilled Plow, dando lugar a la compañía Oliver Farm Equipment. Incluso después de esta consolidación, la planta de Battle Creek continuó produciendo cosechadoras y recolectoras de maíz durante otra tres décadas, hasta 1962, cuando White adquirió Oliver y finalmente cesó las operaciones en la planta.